El presidente de Pei Asset Management, Jairo Corrales, destacó que esperan cerrar el año por encima de los $600.000 millones en ingresos.

Un mes después de su entrada al mercado de renta variable, Pei Asset Management ha tenido un inicio complicado. Pese al revuelo inicial al convertirse en el primer vehículo de inversión inmobiliaria en migrar a este segmento, el valor de sus acciones ha caído 30,6%, pasando de $63.700 el 22 de agosto a $44.150 en la jornada de ayer, según los registros de la Bolsa de Valores de Colombia (BVC).

Lo cierto es que la coyuntura y el entorno actual no es el mejor para Pei y en general para la bolsa y las especies que transan ahí. Y es que en el último mes han salido noticias que “pueden impactar muchísimo el mercado de valores”, según explicó a Forbes el presidente de Pei, Jairo Corrales.

Algunos factores que mencionó el ejecutivo apuntan al anuncio de la reforma tributaria, específicamente el gravamen los dividendos, así como algunas disposiciones especiales a la ganancia ocasional y la forma en la que se va a liquidar el impuesto al patrimonio. Esto sin contar los anuncios de inflación y el aumento de las tasas de interés, que han sido una constante tanto en Colombia como en el mundo.

“Todo eso ha llevado que los inversionistas estén con bastante incertidumbre y bastante quietos, y eso desafortunadamente se ha visto reflejado en el valor del título”, aseguró en entrevista con Forbes Colombia.

Convierta a Forbes Colombia en su fuente habitual de Economía y Finanzas

A pesar de que el título ha tenido ese comportamiento, Corrales destacó que los fundamentales del vehículo han estado muy bien. Esto se vería reflejado en la vacancia, indicador que mide cuántos elementos de todo el portafolio de inmuebles son improductivos y que apenas se acerca al 6%.

Es un indicador relevante porque un vehículo como Pei tiene la capacidad de generar caja recurrentemente, y eso nos permite entregar unos rendimientos distribuibles a nuestros inversionistas cada tres meses. Entonces, todos los indicadores económicos detrás del vehículo están bien, pero el valor del título si se ha visto afectado, pero por temas políticos.

Al respecto, mencionó que algunos bancos AAA están saliendo a captar clientes con CDTs a tasas superiores al 12 o 13%. Cuando eso se mira en el corto plazo, Corrales no duda en reconocer que la cifra es mayor que la rentabilidad que Pei puede arrojar, factor que también ha contribuido a la disminución del título en su valor.

No obstante, destacó resultados favorables en el tema de liquidez medida como volumen. “Nosotros hacemos un seguimiento de cuánto transa el título en el mercado y es lo que nos permite decir que, al paso que vamos, duplicaremos el volumen de títulos transados en los primeros siete meses del año, porque en 13 días ya estamos por encima de lo que era un mes normal”, dijo.

Lea también: Integración bursátil: el mercado regional de capitales podría alcanzar US$1 billón

Al hacer la migración de la rueda de renta fija a la variable en la BVC, Pei también realizó una movida conocida como ‘Split’, que en palabras sencillas, hace que “un título que antes valía 100 ahora vale uno, entonces el inversionista no tiene un solo título que vale 100, si no tiene 100 títulos que valen uno”. De ahí que, de 430.000 títulos, la compañía pasara a 43 millones producto del split.

Para hacer todos sus indicadores, Pei maneja dos parámetros: el valor en libros, certificado por Corficolombiana y denominado como el 100%, y el valor del título en el mercado secundario, que se compara con ese indicador. “Ese es el que decimos que puede estar al 42 o 43% y es el que debería empezarse a recuperarse cuando todas esas acciones que estamos detonando cumplan su objetivo“, sostuvo Corrales.

Cabe destacar que Pei cerró el primer semestre del año con $300.000 millones, cifra que tuvo un aumento de 27% en comparación con el mismo periodo de 2021. A su vez, las estimaciones apuntan a que 2022 puede cerrar con una cifra superior a $600.000 millones.

Sin embargo, Corrales mencionó que hay un tema incluso más importante, y es que así como les han afectado las tablas de interés, el vehículo también está impactado desde el punto de vista del gasto financiero, teniendo en cuenta que tiene una deuda equivalente a $2.9 billones. Pese a ello, el activo de la empresa equivale a $8 billones, por lo que “estamos hablando de un endeudamiento cercano al 36%“, de acuerdo con el directivo.

Siga a Forbes Colombia desde Google News