En 2022 venderán cerca de $900.000 millones. Apuesta fuerte por la transición hacia vehículos a gas. Los proyectos de Scania en Colombia
Este año fue duro para la compañía sueca Scania, una de las más importantes en el mundo de la fabricación de vehículos de transporte pesado y uno de los principales proveedores para los transporte masivos de Colombia tipo Transmilenio.
El alza en el precio del dólar y la permanencia de los problemas logísticos pusieron el mercado muy agitado, pues toda la producción viene de las plantas que tiene Scania en Brasil: dólar caro y fletes en la estratósfera fueron una mezcla compleja que la administración tuvo que manejar.
Así lo explicó Juan Ocampo, general manager de Scania en Colombia, quien también aseguró que a pesar de esas tensiones, la compañía registró buen ritmo en 2022: claramente se hubiera podido vender más con el dólar más barato, pero aún así registraron récord en ventas en todas sus líneas.
Esperan que 2022 cierre con un nivel de facturación cercano a los US$200 millones, es decir algo más de $900.000 millones. Este es un repunte considerable si se considera que el año pasado vendieron casi $600.000 millones de pesos.
“Nosotros somos una empresas enfocada en soluciones de transporte: bus urbano, intermunicipal, camiones o tractomulas, motores marinos e industriales y electrógenos”, explicó Ocampo.
En Colombia están solamente en las líneas de buses urbanos, intermunicipales y camiones donde caben también carros para recolección de residuos, minería y mini mulas.
“Unos de los motivos del crecimiento es que nuestra participación es muy grande en la línea BRT (Bus Rapid Transit) con Transmilenio. Actualmente hay unos 2.500 buses urbanos nuestros operando y propulsados a gas con la tecnología Euro VI”.
La compañía tiene en el país siete sucursales en las principales ciudades y unos 12 talleres dentro de clientes grandes como los transportes masivos, con el fin de prestar servicios de posventa y mantenimiento.
La compañía lleva 10 años con presencia directa en el país y dos años adicionales entre 2010 y 2012 cuando operaron a través de representante de venta. Ahora, así van los proyectos de Scania en Colombia.
El dólar y la logística
Tanto el precio del dólar como los líos de la logística son y seguirán siendo factores que incidan sobre el negocio de Scania.
“Los dos temas han sido complejos. Si el dólar no hubiera alcanzado las cotas hubiéramos vendido más unidades. El tema de los fletes también es complejo, porque a diferencia del resto del mercado nosotros importamos vía marítima. En la región, muchos importan vehículos por vía terrestre, atravesando varias fronteras. Por ejemplo, para llevar vehículos a Perú, atraviesan la frontera brasilero-argentina, la argentina-chilena y luego la chilena-peruana”, comentó. Eso reduce la incertidumbre por cupo en los contenedores y los costos de flete.
Insiste en este tema, porque si bien los fletes han bajado para rutas con China o Europa, para esa el caso de Brasil-Colombia siguen en niveles cuatro o cinco veces los registrados antes de la pandemia.
Buenas perspectivas
A pesar de ello, el futuro se ve bien. Este año lograron cifras récord al vender 420 buses urbanos, 320 intermunicipales y unas 480 tractomulas. Esperan el otro año mantener este ritnmo de ventas.
Dijo que si bien la tributaria genera un choque, es claro que detrás de la medida hay un bien más alto que es el de la estabilidad fiscal del país, porque sería catastrófico que Colombia perdiera definitivamente el grado de inversión por malos manejos fiscales.
Igualmente cree que la decisión sobre el salario mínimo puede afectar a pequeñas y medianas empresas y esto podría empujar a muchos a la informalidad laboral.
“El otro año si bien hemos presupuestado una cantidad similar o incluso mayor en tractomulas enfrentamos reto importante incertidumbre sobre el precio del dólar que va a seguir mostrando una tendencia al alza. Esperamos normalizar el tema de los fletes. Será un año muy retador. Hay otras variables y los grandes eventos que estamos viendo en Ucrania, por ejemplo, pueden generar escasez de alimentos”.
La transición del transporte
Uno de los temas centrales para la industria de la fabricación de vehículos es la necesaria transición hacia formas de impulsar la movilidad con menos emisiones. Scania fue el primer proveedor en poner a disposición de los transporte masivos del país buses propulsados a gas con tecnología Euro VI.
Según Ocampo, “Scania tiene un portafolio super interesante de energías alternativas. Toca virar hacia la electricidad. La pregunta es esa transición cómo se va a dar. En ciudades como Bogotá o Santiago y en otras donde hay presupuesto se puede subvencionar la transición, pero por precio y costos no todas las ciudades van a poder hacerlo”, explicó.
Además el problema no es solo el costo de adquirir vehículos más ecológicos, sino tener la infraestructura disponible para recargar las baterias y hacer el mantenimiento.
“Es necesaria una transición”, insistió.
En Colombia advierte otro problema: Scania ha puesto a circular 2.500 buses impulsados con tecnología Euro 6, pero qué pasa con el resto de la flota de transporte público que tiene una edad promedio de más de 20 años y nisiquiera tiene esa tecnología, lo que quiere decir que es de altas emisiones.
“Scania Colombia tiene 10 años. Llegamos hace 12, pero inicialmente tuvimos distribuidor independiente. Nosotros llegamos para quedarnos. Somos líderes del transporte sostenible urbano e intermunicipal pero vemos desafíos grandes en el segmento de camiones, donde nos queda mucho camino por recorrer”.
Esos son, según Ocampo, los proyectos de Scania en Colombia.
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