El sobrecosto para la generación de empleo formal del sector podría ser de hasta un 35%, lo que afectaría su capacidad de generar empleo.
Semanas de concertación antecedieron la radicación de la reforma laboral el jueves 16 de marzo; sin embargo, algunos puntos de la propuesta no dejaron satisfechos a todos los sectores, quienes aseguran que, tal y como está, el proyecto generaría un impacto negativo para su competitividad.
Así lo manifiestan los comerciantes, puesto que las medidas incluidas en la reforma laboral podría implicarles un sobrecosto para su operación. De acuerdo con Fenalco, el incremento en los gastos laborales de las empresas sería de hasta un 35%, debido a la reducción de la jornada diurna y el aumento del pago del recargo dominical.
“Es importante resaltar que por cada $100 pesos que vende un pequeño comerciante, su ganancia neta es entre $2 y $4 pesos únicamente, por lo que no todos serán capaces de absorber estos costos sin consecuencias. Según nuestra última encuesta, entre las medidas que se tomarían para afrontar estos cambios estarían los reajustes de precios, la sustitución de mano de obra por automatización de procesos y tecnología, los ajustes en los horarios de atención, el cierre de sus puntos de venta y la no contratación de nuevo personal”, precisó el gremio en un comunicado.
Lea también: ¿Por qué Fenalco pidió aplazar la radicación de la reforma laboral?
En su editorial, la empresa de soluciones financieras Corficolombiana detalló las consecuencias que tendría la reforma laboral y concuerda en que el comercio será uno de los sectores que más se resientan por las medidas expuestas en el articulado.
Su análisis apunta a que efectivamente se producirá un sobrecosto para la generación de empleo de calidad, derivado del ajuste al rango de la jornada diurna, que pasará de 6a.m. hasta 9 p.m. a de 6a.m. hasta 6.pm., es decir, una reducción de tres horas. Además, un recargo del 100% para trabajo en domingos y festivos, aunado a un incremento anual del salario de acuerdo con el IPC para quienes reciban salarios por hasta 2 salarios mínimos. Solo por mencionar algunas de las medidas que analizan los expertos.
“Una microempresa que mantenga el presupuesto destinado a remuneración enfrentará la disyuntiva de mantener la mayor parte de su nómina en la informalidad, o emplear a menos personas para cumplir con unas condiciones de formalidad todavía más estrictas”, sugiere el editorial. Un panorama que resulta preocupante, como plantea la entidad, si se tiene en cuenta que una gran parte del tejido empresarial de Colombia está conformado por micro, pequeñas y medianas empresas.
Respecto a los sectores que tendrán un mayor impacto en caso de aprobarse la reforma, el informe encontró que este proyecto resultaría especialmente perjudicial para los negocios cuya operación dependa de jornadas laborales más extensas, con trabajo nocturno y en fines de semana. Ejemplo de esto son los comercios, los restaurantes, los bares, entre otros.
Puede interesarle: Colombia trabajará una hora menos este año: ¿cómo será la reducción de jornada laboral?
El ranking elaborado por Corficolombiana indica que el comercio y la reparación de vehículos serán las actividades que mayor aumento evidencien en los costos de generación de empleo formal.
Le siguen las actividades profesionales, científicas y técnicas, así como los servicios de salud, debido a su volumen de personal. Con un menor impacto, pero igual considerable, las empresas de la industria manufacturera, los servicios de educación y la administración pública y defensa se suman al top 10 de los sectores más afectados.
En contraste, entre los sectores menos afectados figuran las actividades inmobiliarias, el suministro de servicios públicos, el sector de información y comunicaciones y las actividades financieras y de seguros.
Igualmente, el equipo de analistas llama la atención frente a la ausencia de propuestas claras que permitan atender a otras necesidades estructurales del mercado laboral y que son la raíz del mal desempeño del trabajo. “Este mal desempeño tiene origen en un sistema de formación que no es acorde
con las necesidades del sector productivo, un salario mínimo elevado relativo a la distribución
salarial, deficiencia en los mecanismos de protección contra el despido y debilidad de la
justicia laboral”, precisan.
Convierta a Forbes Colombia en su fuente confiable de noticias.