Mañana empieza la agenda de la visita de Petro a Europa y varios mandatarios se han mostrado interesados en el tema,
Unos 13 jefes de Estado de la Unión Europea (UE) han solicitado encuentros bilaterales con el presidente Gustavo Petro para hablar de su idea de cambiar deuda por acción climática. La apretada agenda tendrá lugar en el marco de la cumbre UE-Celac, que arranca mañana lunes. Entre los estados miembros que se reunirán con el mandatario destacan Austria, Dinamarca, Polonia, Lituania, Estonia, Eslovenia, Portugal, Suecia, Grecia y España.
Una de las apuestas de la UE en este encuentro es estudiar el cambio de deuda por acción climática en las economías emergentes, pues el discurso que pronunciará Petro, encargado de clausurar la cumbre como futuro presidente pro tempore de la Celac, llamará a una discusión sobre las responsabilidades de grandes emisores, tanto desde la banca multilateral como con los países desarrollados.
Al respecto, el embajador de Colombia ante la Unión Europea, Jorge Rojas, señaló que la propuesta no busca una condonación de la deuda, sino que la dejen de cobrar en caso de que los países en cuestión generen acciones climáticas que beneficien al planeta.
Cabe destacar que la presidencia de la CELAC para 2025 se le otorgó a Colombia por unanimidad. Eso implica que en octubre de ese año se hará la cuarta cumbre UE-Celac, que se llevará a cabo en Cartagena.
Siga a Forbes Colombia desde Google News
Durante la cumbre se esperan alrededor de 60 intervenciones de unos tres minutos de duración. Asistirán todos los mandatarios de los 27 estados miembros de la UE y 26 de los 33 miembros de CELAC. Algunas de las grandes ausencias serán la del venezolano Nicolás Maduro, el mexicano Andrés Manuel López Obrador y el nicaragüense Daniel Ortega.
También es importante mencionar que, si bien Petro dará la discusión sobre el tema, el texto de la cumbre no reflejaría las preocupaciones de Latinoamérica al respecto. Se espera que los jefes de Estado de la UE fijen posición, pero los europeos no quieren admitir que hay preocupaciones de sus objetivos y ambiciones.
Al mismo tiempo, el embajador Rojas mencionó algunas restricciones que estarían afectando las economías de la región. Entre ellas se cuenta la reducción de fertilizantes que pueden llegar a los países europeos. “Nos detienen frutas en los puertos, pero no hay sustento técnico para ello”, añadió.
Con respecto a la deforestación, la gente quiere estar segura de no consumir nada que tenga que ver con dicha práctica. Eso ha llevado a una regulación donde el café, el cacao y la palma deben tener trazabilidad de producción.
Convierta a Forbes Colombia en su fuente habitual de Economía y Finanzas
Asimismo, el importador debe declarar que hay un sistema de seguimiento de toda su cadena de suministro. Si bien esta directriz ya está en vigencia, hay periodo de transición que concluye el 30 de diciembre de 2024.
Incluso, se contempla un arancel adicional a productos que entren a UE pagando los mismos derechos de emisión que producen en el país, calculado sobre la base de la UE. Esto ha provocado quejas de naciones como India y China.
“Hay que pensar cómo hacer un sistema de valoración diferenciada en el tema de carbono con las responsabilidades comunes, pues algunos países tienen mayor deuda”, comentó Rojas.
Lo que genera preocupación, sobre todo con el Pacto Verde Europeo, que al parecer no será abordado, es que no da tiempos ni plazos para estas restricciones ni reconoce soberanía territorial. Se trataría de una debida diligencia corporativa, exigiendo que en ninguna parte de la cadena de suministro haya temas ambientales ni de trabajo forzado.
Lea también: Europa y sus bancos listos para apoyar la transición verde latinoamericana
Con esto en mente, Rojas detalló que el gobierno trabaja en defender intereses de productores colombianos para evitar una crisis grave para la economía.
“El Pacto Verde se debe revisar según corresponsabilidad entre Latinoamérica y la UE. Lo que vemos es un imperialismo regulatorio donde nos hacen daño. Por eso no quieren que se trabaje el tema”, explicó Rojas.
En medio de esta coyuntura, el Gobierno le apuesta a un “gran negocio” para las siguientes tres décadas: producir hidrógeno verde en La Guajira y adoptar los puertos del país para exportar a aquellos que lo pueden recibir, como Bélgica. Ese modelo de producción apunta a largo plazo y hay acción climática en los territorios.
En otros temas, la UE mantiene su disposición de apoyar la paz total con la revisión de nuevos mecanismos para mantener apoyos económicos al proceso de paz y los diálogos en territorio. Se espera que se mantengan los mismos flujos de dinero que vienen llegando desde hace seis años.