La tasa de desempleo para los hombres fue de 7,7%, mientras que para las mujeres fue de 11,6%, lo que equivale a una brecha de 3,9 puntos porcentuales.
Esta semana el DANE entregó buenas noticias respecto a la recuperación del mercado laboral en Colombia, logrando tener uno de los registros de desempleo más bajos del año y volviendo a ubicarse en un solo dígito. De acuerdo con la entidad, la tasa de desempleo en junio fue de 9,3%, una cifra que no se veía en un junio desde el 2019, previo a la pandemia.
La directora Piedad Urdinola no solo destacó la mejoría en el empleo, también resaltó el aumento en la cantidad de población ocupada en el país, así como la reducción de 419 mil personas entre la población desocupada.
A las noticias positivas se le sumó una caída en las tasas de desempleo por sexo, tanto para hombres como para mujeres, con una variación favorable además en la reducción de brechas entre ellos. Según las cifras de este mes, la tasa de desempleo para los hombres fue de 7,7%, mientras que para las mujeres se ubicó en 11,6% (comparado con 14,1% de junio de 2022), lo que equivale a una brecha de 3,9 puntos porcentuales.
“Es la mínima que hemos reportado desde hace varios años en el país”, aseguró Urdinola. Específicamente desde 2014, acota el informe de Mercado Laboral.
Para Jackeline Piraján, economista de Scotiabank Colpatria, es una noticia positiva que las métricas de mercado laboral entre hombres y mujeres se estén emparejando; sin embargo, insiste, es importante analizar las condiciones en que se está dando esa recuperación del empleo.
“Es importante señalar que las mujeres han sufrido de tasas de desempleo estructuralmente más altas. Durante la pandemia, con la reducción de la presencialidad y falta de dinamismo de la economía, vimos que las mujeres fueron las más impactadas por el desempleo”, explica.
Tras la reapertura, señala, pasó poco más de un año para ver una recuperación real en el empleo de mujeres, jalonado principalmente por la reactivación del sector de servicios, que demanda un importante volumen de mano de obra femenina.
“Esta ganancia de empleo está concentrada en sectores que por tradición son más informales que los de los hombres, como comercio, servicios domésticos y generales, entre otros”, acota. Por lo que invita a revisar si en materia de calidad de empleo también se evidencia esa reducción de brechas.