El Premio a la CEO del Año Forbes destacó a la empresaria que encabeza Ocesa en Colombia: Luz Ángela Castro. 

Este año la industria del entretenimiento sacó la cara por la economía. El fenómeno es evidente: el auge de conciertos y espectáculos, el posicionamiento de la industria musical  colombiana a nivel mundial y todo lo que se mueve alrededor de ese mundo ha traído solo buenas noticias para el país y para los empresarios que se mueven en estos negocios.

Detrás del crecimiento del 11,8% que ha tenido esta industria durante el tercer trimestre del año, no hay una gran maquinaria, solo algunas empresas que lo están haciendo bien. Entre ellas Ocesa, que entre otro hitos protagonizó la movida del año: Live Nation, la empresa más grande de entretenimiento en vivo, a través de Ocesa, se quedó con la participación mayoritaria de la colombiana Páramo Presenta, consolidando un gigante del sector. 

Ocesa también ha sido el promotor de la alegría de los fans de artistas como Coldplay, RBD, Madonna, U2, Rolling Stones, el Circo del Sol, entre otros. Por esto y mucho más, el Premio a la CEO del Año Forbes destacó a la empresaria que encabeza Ocesa en Colombia: Luz Ángela Castro. 

En su discurso, la empresaria agradeció a Forbes por el reconocimiento, a su familia por el apoyo y a la casa matriz de Ocesa en México por creer en Colombia como un mercado con potencial. 

También, destacó su papel como una mujer en esta industria. “He enfrentado y superado numerosos retos, y el primero de ellos fue ganarme un espacio de credibilidad y respeto en un medio muy masculino, ser una interlocutora válida para muchos, y una líder en el sector empresarial”, dijo castro. “Liderar desde el ejemplo de otras mujeres es algo que me ha obsesionado siempre”, añadió. 

Castro también hizo énfasis en la importancia de este sector para la economía y la felicidad de los colombianos. “Estoy comprometida a seguir liderando con determinación, y a trabajar incansablemente para que la cultura y el entretenimiento sigan siendo motores de transformación en nuestro país, y ser un referente para las generaciones futuras”. 

“Estar hoy acá es un símbolo del avance de la visibilidad de nuevas industrias, tal como lo es la cultura y el entretenimiento, a veces consideradas superfluas frente a otras industrias o problemáticas del país, pero son por el contrario un motor de dinamización económica, turismo y empleo, además de generadores de felicidad”. Pues como bien lo dijo Bob Marley: “la música puede cambiar el mundo”. 

Castro finalizó afirmando que agradece “este premio no solo en mi nombre, sino en representación de un equipo comprometido y de todas las mujeres que buscan aprender, aprender y aprender. Y a todas las mujeres que buscan abrirse camino en el mundo de los negocios. Sigamos trabajando juntos, inspirándonos mutuamente y construyendo un futuro donde las oportunidades se den por el talento sin distinción de género”. 

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