La OMS señala la necesidad de tomar “medidas urgentes” al ser productos altamente adictivos, mientras los comercializan agresivamente hacia los niños.
Los gobiernos de todo el mundo deben tomar “medidas decisivas” para acabar con los cigarrillos electrónicos y prohibir los vapes de sabores, dijo el jueves la Organización Mundial de la Salud; advirtiendo que deben ser tratados en línea con otros productos similares, ya que la gran industria del tabaco utiliza los productos nocivos para construir la legitimidad, mientras los comercializan agresivamente hacia los niños.
DATOS CLAVE
- “Es necesario tomar medidas urgentes” para proteger a los niños, a los no fumadores y a la población en general de los “alarmantes” efectos sobre la salud de los cigarrillos electrónicos, según la OMS.
- La OMS reconoció que los cigarrillos electrónicos, también conocidos como e-cigs o vapes, pueden ayudar a las personas a dejar de fumar, pero advirtió de que los productos que contienen nicotina son “altamente adictivos” y deben estar estrictamente regulados como medicamentos en lugar de ser lanzados como productos de consumo en el mercado abierto.
- Las pruebas demuestran que los vapes no son “eficaces para dejar de fumar” a nivel de población cuando se venden como producto de consumo, dijo la OMS, y añadió que las grandes tabacaleras han utilizado estos nuevos productos para “conseguir un asiento en la mesa de formulación de políticas de los gobiernos para presionar en contra de las políticas de salud”.
- La agencia sanitaria acusó a la industria tabaquera de utilizar “pruebas falsas” para promover los cigarrillos electrónicos como herramienta de reducción de daños, al tiempo que “sigue vendiendo miles de millones de cigarrillos” y comercializa los vapes de forma “agresiva” entre niños, adolescentes y jóvenes.
- “Los niños están siendo reclutados y atrapados a una edad temprana para usar e-cigarrillos y pueden engancharse a la nicotina”, dijo el jefe de la OMS, el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, quien instó a los países a “proteger a sus ciudadanos” y promulgar “medidas estrictas para prevenir su consumo”.
- Los países que ya prohíben la venta de cigarrillos electrónicos deben reforzar la aplicación de la ley y seguir apoyando los esfuerzos de salud pública para reducir el consumo de tabaco, dijo la OMS, aconsejando a los países que permiten la venta comercial de vaporizadores que los graven, prohíban las versiones con sabores, limiten la concentración y la calidad de la nicotina permitida y tomen medidas para “reducir su atractivo”.
ANTECEDENTES CLAVE
Los cigarrillos electrónicos funcionan calentando un líquido para formar un vapor que se inhala. Normalmente, este líquido contiene nicotina, el compuesto que hace adictivos productos como los cigarrillos. Las pruebas sugieren que los cigarrillos electrónicos son mucho menos perjudiciales que fumar, ya que no producen muchas de las sustancias químicas más peligrosas asociadas a la combustión del tabaco, como el monóxido de carbono y el alquitrán, y que pueden utilizarse como herramienta para ayudar a las personas a controlar el deseo de fumar y dejar de fumar para siempre. En medio de la creciente oposición al tabaquismo en todo el mundo, gigantes del tabaco como Philip Morris International (PMI) y British American Tobacco han orientado hábilmente sus modelos de negocio hacia productos sin humo, como los cigarrillos electrónicos y el tabaco calentado, como el futuro de la industria, y se enfrentan a la nueva competencia de advenedizos como Juul. La industria, que tiene un historial documentado de minimizar o rebatir las pruebas que demuestran que sus productos son nocivos, se ha enfadado por la oposición de la OMS a los vaporizadores y productos similares, tachándola de oportunidad perdida para reducir el tabaquismo. El tabaco mata a unos 8 millones de personas al año, según la OMS, que afirma que “la epidemia de tabaquismo es una de las mayores amenazas para la salud pública a las que se ha enfrentado el mundo”. Alrededor de 1,3 millones de estas muertes son consecuencia de la exposición al humo ajeno.
GRAN NÚMERO
US$462 millones. Esa es la cantidad que el fabricante de cigarrillos electrónicos Juul Labs acordó pagar en abril para zanjar las reclamaciones por haber comercializado sus productos a menores en seis estados de Estados Unidos. La empresa ha llegado a un acuerdo de más de US$1.000 millones con 45 estados y no admitió haber cometido ningún delito como parte del acuerdo.
LO QUE NO SABEMOS
Se desconocen los efectos a largo plazo del vapeo sobre la salud. Aunque es claramente menos perjudicial que fumar —una actividad que, según los CDC, “daña casi todos los órganos del cuerpo, causa muchas enfermedades y reduce la salud de los fumadores en general”—, el vapeo dista mucho de ser inocuo. Según la OMS, se ha demostrado que el vapeo genera “sustancias tóxicas, algunas de las cuales se sabe que causan cáncer y otras que aumentan el riesgo de trastornos cardíacos y pulmonares”, y su consumo puede afectar al desarrollo cerebral y provocar trastornos del aprendizaje. El vapeo también puede afectar al desarrollo del feto si se usa durante el embarazo y también “plantea riesgos para los transeúntes”. La OMS lleva años sosteniendo que los productos para vapear no son seguros. Su postura está en consonancia con la oposición de larga data de la organización a la industria tabacalera, de la que dice que “se beneficia destruyendo la salud”.
CITA CRUCIAL
“Hay un aumento alarmante en el uso de cigarrillos electrónicos entre niños y jóvenes, con tasas que superan el uso de adultos en muchos países”, dijo Ruediger Krech, Director de Promoción de la Salud de la OMS. Las empresas “se dirigen a los niños a través de las redes sociales y las personas influyentes”, la gran variedad de sabores que ofrecen (al menos 16.000) y por tener personajes de dibujos animados y “diseños elegantes” en los productos, dijo Krech.
Este artículo fue publicado originalmente en Forbes US
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