La psicóloga Haidy Sánchez Mattson asegura que los emprendimientos sociales no son tarea fácil, pero que su impacto merece toda la pena.
Siendo apenas una niña, la colombiana Haidy Sánchez Mattson conoció de cerca la realidad educativa de una región apartada -y que por muchos años fue relegada en el olvido- como lo es el Chocó. Sin embargo, supo abrirse camino desde su natal Quibdó hasta cruzar las fronteras colombianas y llegar a Suecia, donde ha construido su proyecto de vida, a nivel profesional y familiar. A miles de kilómetros de distancia, Sánchez Mattson busca cambiar la historia para cientos de niñas en comunidades vulnerables.
Hace más de 20 años que migró a Suecia y tuvo que empezar de cero, pues no podía ejercer su carrera de lleno sin antes aprender el idioma y homologar sus conocimientos en la materia. El inicio fue desafiante, como lo es para todo inmigrante que deja atrás a su país. La gesta ha valido la pena para la psicóloga chocoana, quien gracias a su experiencia y trabajo ha logrado contribuir a su comunidad.
Mientras trabaja en una organización de atención integral a personas en condición de discapacidad en Suecia, lidera la Fundación Nuevo Amanecer ESAL, que ella misma fundó, mediante la cual ofrece espacios de formación a las niñas y niños de regiones vulnerables en su departamento de origen. Entre sus programas más reconocidos se encuentra el de Robótica Femenina Girls Powered Chocó, en el que niñas indígenas y afrodescendientes se forman en áreas STEAM.

Este año participarán en la competencia anual de robótica en Medellín, con el apoyo de la Fundación Global Arte, Ciencia y Tecnología, para lo que vienen preparándose desde el año pasado.
No es la única iniciativa que ha liderado Sánchez Mattson desde su fundación, también se ha unido con grandes aliados para realizar jornadas de salud mental, capacitaciones, talleres y ha habilitado otra serie de espacios para el desarrollo de los niños y niñas de su región.
En el camino se ha encontrado con empresas dispuestas a facilitar su labor, sobre todo desde la conexión remota, que es uno de sus mayores retos, considerando que se trata de una zona con condiciones complejas de conectividad y de acceso a la tecnología.

Algunos de sus aliados para extender sus capacidades en el territorio han sido Microsoft, Google, Lenovo, Motorola, Ecopetrol y otras empresas que han apoyado con la dotación de equipos, pero también en la generación de conocimiento y transformación digital, mediante aulas virtuales, que han impactado a más de 8.000 niños de Chocó.
“Estos cursos que hemos desarrollado con Microsoft o Google, pero también con The Biz Nation, ha dado a jóvenes y adultos la posibilidad de enriquecer su hoja de vida y con esos conocimientos muchos han decidido emprender”, dice Sánchez Mattson.