El regreso de Trump a la Casa Blanca es uno de los mayores regresos políticos de la historia y con sus políticas, el Bitcoin vive por primera vez un contexto sin vientos en contra. ¿Qué esperar?

Desde principios de noviembre, Bitcoin y los mercados de criptomonedas han registrado un crecimiento explosivo tras la reelección de Trump. El precio de Bitcoin pasó de ~US$67.000 el día de las elecciones, superando el pasado 4 de noviembre en la noche el icónico nivel de US$100.000, un aumento del 50%.

Ahora, Trump regresa a la Casa Blanca en uno de los mayores regresos políticos de la historia, acompañado de 250 políticos pro-cripto que respaldan la tecnología. Una agenda clara ya ha sido establecida: remover al actual presidente de la SEC, definir una legislación para stablecoins y activos digitales, y posicionar a Estados Unidos como líder en adopción y desarrollo tecnológico. Por primera vez en tres años, Bitcoin y las criptomonedas no enfrentan vientos en contra.

La postura de Trump sobre las criptomonedas es positiva

Desde su participación en la conferencia Bitcoin Nashville a principios de este 2024, Trump dejó claro que es pro-cripto y que apoyará a los constructores actuales de la industria. Las promesas son claras: nombrar reguladores que respalden una legislación común, revocar la norma SAB121 para que los bancos puedan custodiar activos digitales, y establecer marcos legales que incentiven a las mejores empresas cripto a operar en Estados Unidos.

Los beneficios para Estados Unidos son evidentes. Emisores de stablecoins como Tether (USDT) y Circle (USDC) tienen más de US$200 mil millones en circulación, lo que significa que esta misma cantidad está respaldada en reservas de dólares, principalmente en bonos del Tesoro. Los stablecoins denominados en dólares están creciendo rápidamente en otros países, ofreciendo a los usuarios formas accesibles de tener dólares, que se integran en las economías locales. Esto genera una mayor demanda y fortalece el dólar estadounidense.

Una reserva federal de Bitcoin está sobre la mesa

El almacenamiento de valor en el mundo se distribuye principalmente en dos áreas: preservación de capital y utilidad. Aproximadamente la mitad de la riqueza mundial (~US$450 trillones) está invertida en activos que preservan capital y generalmente se revalorizan con el tiempo. Bitcoin, con un desempeño excepcional en los últimos 15 años, encaja perfectamente en este caso de uso.

Los activos tradicionales para la preservación de capital suelen ser físicos o financieros, como bienes raíces, acciones o materias primas. Sin embargo, estos activos enfrentan riesgos físicos y costos de mantenimiento que pueden erosionar su valor. Bitcoin resuelve estos problemas al ser una reserva de valor global, libre de inflación, control centralizado o desgaste físico. A medida que más instituciones públicas y privadas reconozcan el valor digital de Bitcoin, su adopción continuará creciendo.

Trump y su equipo han identificado este potencial y están considerando establecer una reserva estratégica de Bitcoin, con la meta de adquirir 1 millón de BTC en los próximos cuatro años, como parte de una estrategia para reducir la deuda soberana del país.

Bitcoin está respaldado por energía y descentralización

La red monetaria global de Bitcoin cuenta con más de 200 millones de usuarios, cerca de US$1 trillón en depósitos totales y consume más de 18 gigavatios de energía, el equivalente a 18 reactores nucleares. Su estabilidad y caso de uso global están atrayendo la atención de otros gobiernos e instituciones financieras privadas. A medida que disminuye el riesgo de extinción de usuarios, más gestores de activos y empresas tradicionales están entrando al ecosistema.

Las estimaciones de precio por encima de US$200.000 para Bitcoin son cada vez más comunes y predecibles, con buena razón. A diferencia de otros activos, Bitcoin tiene una oferta fija, una inflación programada y transparente. Esto significa que, a medida que disminuyen los niveles de inventario en intercambios y mercados OTC, el único factor que puede ajustar la oferta frente a la demanda es el precio.

Con el aumento continuo del precio, Bitcoin reafirma su modelo de negocio. Al final, nunca hubo vientos reales en contra.

Por:  Alex Cavallero*
Twitter: @apcavallerooo
*El autor es licenciado en Ciencias de la Universidad de Massachusetts Boston, con especialización en Finanzas. Estratega, empresario y cofundador de KII Global, ecosistema blockchain.

Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes Colombia.

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