Según el organismo, las tensiones comerciales mundiales podrían afectar las perspectivas económicas del país por la caída del precio de las materias primas y la volatilidad financiera de los mercados.

Este lunes 21 de abril comienzan en Washington las reuniones de Primavera del FMI y el Banco Mundial 2025, con la participación del equipo económico del Gobierno, liderado por el ministro de Hacienda, Germán Ávila Plazas, y los viceministros Carlos Emilio Betancourt (General) y Marta Juanita Villaveces (Técnica).

Aunque el equipo económico reafirmará el compromiso con una política económica responsable, el personal técnico del FMI que realizó visitas a Bogotá a mediados de febrero y principios de abril advirtió en un reporte que los déficits fiscales y la deuda pública de Colombia han subido más de lo esperado.

“El déficit fiscal global del gobierno central se incrementó hasta el 6,7% del PIB en 2024 desde el 4,2% del PIB de 2023, lo que lo sitúa 1,1 puntos porcentuales del PIB por encima de la meta de déficit fijada por las autoridades en el marco fiscal de mediano plazo”, recordó la misión que advirtió que el aumento del déficit es un reflejo de unos ingresos tributarios menores de lo previsto y de un gasto primario por encima del objetivo, a pesar de los ajustes del gasto realizados a finales de 2024.

El organismo recordó que los déficits más elevados, junto con un peso algo más débil, situaron la deuda pública bruta en un 61,3% al final de 2024.  “En consecuencia, los diferenciales colombianos se han ampliado, sobre todo en relación con los de países comparables, afectados igualmente por el endurecimiento de las condiciones financieras mundiales”, apuntó.

No obstante, el Fondo dijo que, en un contexto en el que los riesgos mundiales son altos y cambiantes, “prosiguen las conversaciones sobre las perspectivas y sobre las políticas que pueden aplicarse para mitigar los shocks y, al mismo tiempo, fortalecer significativamente las finanzas públicas”. 

Para el personal técnico del FMI, las tensiones comerciales mundiales podrían tener un impacto en las perspectivas económicas de Colombia, a través del canal de precios de las materias primas, y de los canales financieros y comerciales. 

El Plan Financiero 2025 del Gobierno publicado en febrero contempla una mejora del déficit del gobierno central hasta el 5,1% del PIB, aunque analistas locales y las principales calificadoras como Moody´s han puesto en duda el cumplimiento de la regla fiscal en 2025, en un entorno de volatilidad política y políticas impredecibles.

También le puede interesar: Moody´s, la única calificadora que mantiene el grado de inversión a Colombia, lanza voz de alerta por situación fiscal