Amcham Colombia y la Andi señalaron que la Comisión de Relaciones Exteriores debe evaluar qué resultados concretos han experimentado otros países que se han adherido a la Iniciativa y analizar sus implicaciones prácticas, económicas y geopolíticas para el país.
El Gobierno Nacional citó a la Comisión Asesora de Relaciones Exteriores para analizar la posible adhesión de Colombia a la Iniciativa de la Franja y la Ruta de China el próximo jueves 8 de mayo.
“La canciller Laura Sarabia presentará a los miembros de la comisión un memorando de entendimiento con China como tema central sobre la Cooperación de la Franja Económica de la Ruta de la Seda y la Iniciativa de la Ruta Marítima de la Seda del Siglo XXI”, se lee en la citación de la sesión.
La respuesta de los gremios no se hizo esperar. Bruce Mac Master, presidente de la Andi, escribió en su cuenta de la red X: “Colombia quiere hacer esto en este momento? ¿A cambio de qué? ¿Qué justificación tiene desde el punto de vista de la estrategia internacional de estos días? ¿Cómo afecta la relación con nuestros aliados comerciales que nos compran la mayoría de nuestras exportaciones? Ojalá se tengan estos aspectos al momento de discutir o considerar el tema”.
Entre tanto, la presidenta de la Cámara Colombo Americana, AmCham Colombia, María Claudia Lacouture, planteó una serie de preguntas sobre las consecuencias del anuncio.
“Ojalá en su próxima sesión, la Comisión Asesora de Relaciones Exteriores aborde los siguientes interrogantes. ¿Qué resultados concretos han experimentado otros países que se han adherido a la Iniciativa de la Franja y la Ruta en términos de crecimiento económico, infraestructura o transferencia de conocimiento?¿Qué implicaciones prácticas, económicas y geopolíticas tendría para Colombia adherirse formalmente a la Iniciativa de la Franja y la Ruta?”.
“¿Dado que en la última década el comercio bilateral entre Colombia y China ha crecido, pero con un déficit superior a los 13.000 millones de dólares, ¿cómo se espera que esta adhesión contribuya a una mayor simetría en la relación comercial?”.
“¿Qué mecanismos establecerá China para asegurar que su relación comercial con Colombia no genere distorsiones de mercado ni prácticas de competencia desleal que perjudiquen a la industria y el empleo colombiano? Y muchas otras preguntas se deben abordar para poner en la balanza lo que se gana y lo que se arriesga”.
En la última Asamblea de Amcham, el Embajador (e) de Estados Unidos en Colombia, John McNamara, dijo que la administración Trump ha tomado nota del acercamiento de gobierno de Colombia a China, un “país comunista y no democrático”.
“Tiene implicaciones a largo plazo, ya que afecta el bienestar y la seguridad regional”, agregó y dijo que, aunque respetan la soberanía de Colombia, ese tipo de decisiones deterioran el clima de las relaciones binacionales.
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