Aunque la recesión se define como dos trimestres de crecimiento negativo, una situación que no se cumple en la actual coyuntura, el presidente de los industriales, Bruce Mac Master, pide medidas contracíclicas. Esta semana el Dane confirmó lo que era un secreto a voces: la economía atraviesa una profunda desaceleración, que se reflejó en un […]
Aunque la recesión se define como dos trimestres de crecimiento negativo, una situación que no se cumple en la actual coyuntura, el presidente de los industriales, Bruce Mac Master, pide medidas contracíclicas.
Esta semana el Dane confirmó lo que era un secreto a voces: la economía atraviesa una profunda desaceleración, que se reflejó en un crecimiento de apenas 0,3% en el segundo trimestre y en una caída del 1%, al comparar el segundo trimestre frente al primero.
“Un 0,3% es algo muy parecido al 0%. Es la ratificación de una tendencia decreciente que nos preocupa porque no sabemos qué va a pasar con el tercer trimestre”, dijo Bruce Mac Master, presidente de la Andi, que representa al sector industrial que, en el segundo trimestre, se contrajo -4%.
“Realmente creo que las alarmas están encendidas y lo que más preocupa es que no vemos todavía señales claras de medidas contracíclicas’, señaló el directivo gremial que le pidió al gobierno una estrategia de crecimiento que incluya al sector.
Y si bien Mac Master reconoció que todas las proyecciones -incluidas las de la Andi- apuntaban a una profunda desaceleración de la economía, por cuenta de las elevadas tasas de interés, que afectan el consumo y la inversión, el directivo dijo que esa situación debió “generar una cantidad de alarmas y programas contracíclicos que no se pusieron en ejecución, lo que nos tiene con ese segundo trimestre tan malo”.
“Un país que no crece o crece muy poco como el 0,3%, es un país que no es capaz de absorber la nueva gente que entra al mercado laboral y disminuir la pobreza”, concluyó.
También le puede interesar: ¿Qué puede hacer el gobierno para reactivar la economía y evitar un estancamiento?
Sin embargo, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, se mostró más optimista y señaló que las inversiones en obras civiles y vivienda contribuirán a acelerar el crecimiento durante el segundo semestre.
“Los recursos ya están para financiar las obras civiles, vías principales y vías terciarias, y vamos a trabajar con el sector financiero para que garantice el cierre financiero de las obras para que se puedan adjudicar y arranquen”, señaló en la asamblea de la Andi que concluye este viernes en Cartagena.
El mensaje de Bonilla a los empresarios reunidos en la asamblea de la Andi fue que la economía se enfrió; el objetivo que tenía el Banco de la República ya es una realidad, como resultado del aumento en su tasa de intervención del 1,75% al 13,25% en 18 meses.
“Ahora el objetivo es recuperar la economía y el mensaje tiene que ser comenzar a bajar las tasas”, señaló el funcionario, quien dijo que con la adición presupuestal aprobada por el Congreso se garantizaron los recursos para el subsidio a la cuota inicial y a la tasa de interés.
Le puede interesar: Analistas proyectan dólar en $4.106, inflación de 9,09% y tasa del Emisor en 12,25% al cierre del año
Por otra parte, el ministro se mostró optimista por la senda de la inflación, que ya acumula tres meses a la baja, con lo cual podría cerrar el año en niveles de un dígito.
“El nivel actual de la inflación sigue siendo alto, pero el comportamiento reciente deja un espacio al Banco de la República se comience a pensar en qué momento se pueden bajar las tasas”, dijo.
A juicio de Bonilla, aunque en agosto la Junta Directiva del Emisor no tocará el tema de las tasas, ello podría ocurrir en septiembre u octubre.