La DIAN ha introducido un nuevo documento obligatorio para ciertos contribuyentes
La DIAN ya publicó el calendario tributario para 2025, las personas naturales, jurídicas y grandes contribuyentes deben prepararse desde ya para cumplir con sus obligaciones fiscales y evitar sanciones. Durante el año gravable 2024, miles de colombianos generaron ingresos o movimientos financieros que de acuerdo con la ley los obligan a declarar renta en 2025.
Conocer los montos mínimos, los plazos establecidos y las condiciones según el tipo de contribuyente es indispensable para evitar errores comunes, planificar correctamente el cumplimiento tributario además de verificar si este año ya aplica para la conciliación fiscal.
¿Quién debe declarar renta en 2025?
Deberán presentar la declaración de renta en 2025 aquellas personas naturales que durante el año gravable 2024 cumplieron con al menos una de las siguientes condiciones:
- Ingresos anuales superiores a $65.891.000 (1.400 UVT).
- Patrimonio bruto mayor a $211.792.000 (4.500 UVT).
- Consumos o movimientos financieros superiores a $65.891.000 (1.400 UVT).
Importante: Declarar no siempre implica pagar impuestos, pero el incumplimiento de esta obligación puede acarrear sanciones del 5 % sobre el valor del impuesto más intereses adicionales, según advierte PwC Colombia.
Fechas clave del calendario fiscal 2025
Estas son las fechas oficiales para presentar la declaración y pagar impuestos en Colombia en 2025, según el tipo de contribuyente:
Grandes contribuyentes:
- Primera cuota: del 11 al 24 de febrero.
- Segunda cuota: del 9 al 24 de abril.
- Tercera cuota: del 11 al 25 de junio.
Personas jurídicas:
- Primera cuota y declaración: del 12 al 23 de mayo.
- Segunda cuota: del 9 al 22 de julio.
Personas naturales:
- Declaración y pago: del 12 de agosto al 24 de octubre, según los dos últimos dígitos del documento de identidad.
Calendario y nuevo requisito
En el caso de las personas naturales, la DIAN establece un calendario escalonado para evitar congestiones en el sistema. Las fechas límite para declarar y pagar impuestos van del 12 de agosto al 24 de octubre de 2025, y dependen de los dos últimos dígitos del número de cédula. Quienes tengan documentos terminados en 01 deberán declarar en las primeras fechas, mientras que aquellos con dígitos finales más altos, como 99, lo harán en las últimas semanas. Por eso, es fundamental revisar con anticipación el cronograma oficial y marcar en el calendario la fecha correspondiente.
Además, la DIAN anunció recientemente una novedad para ciertos contribuyentes: será obligatorio presentar el Reporte de Conciliación Fiscal antes de la declaración del impuesto de renta. Este documento aplica para quienes declaran mediante el formulario 110 —es decir, quienes están obligados a llevar contabilidad o lo hacen voluntariamente— y cuyos ingresos brutos en 2024 hayan sido iguales o superiores a 45.000 UVT, lo que equivale a aproximadamente $2.117.925.000.
Principales errores y cómo evitarlos
Según expertos de PwC, los errores más comunes entre los contribuyentes son:
- Desconocer las fechas límite.
- No declarar todos los ingresos o activos.
- Usar incorrectamente los beneficios tributarios.
La recomendación principal: consultar fuentes actualizadas y, de ser posible, contar con asesoría profesional.
Para quienes no puedan cumplir con los pagos en los plazos establecidos, la DIAN permite solicitar facilidades de pago de hasta cinco años. Este mecanismo ayuda a evitar embargos y sanciones, siempre que se presente la documentación requerida en tiempo y forma.
Nuevas obligaciones para trabajadores digitales
Si usted genera ingresos mediante plataformas digitales: creador de contenido, a través de publicidad o servicios digitales, debe estar al tanto de las nuevas obligaciones.
- Llevar contabilidad.
- Emitir facturación electrónica.
- Declarar impuestos como Renta, IVA e Industria y Comercio.
Cumplir con estas exigencias es fundamental para evitar sanciones y mantener sus operaciones en regla. En un entorno donde la digitalización avanza rápidamente y las autoridades tributarias fortalecen los mecanismos de fiscalización, la formalización de actividades económicas digitales no solo es una obligación legal, sino una forma de proteger su negocio, acceder a beneficios tributarios y proyectarse con mayor solidez en el mercado.