El apetito de las instituciones financieras por las firmas inmobiliarias ha disminuido significativamente en respuesta a los riesgos de algunas constructoras.
Dado que Evergrande guarda silencio sobre los pagos de la deuda en dólares y da prioridad a los acreedores locales, los inversores en el extranjero se preguntan si se enfrentarán a grandes pérdidas al final de los períodos de gracia de 30 días para los cupones del mes pasado.
Según Global Times, la compañía que carga con una deuda de US$ 305.000 millones, acaba de venderle una participación del 51% a Hopson Development por más de US$ 5.100 millones.
La filial de Evergrande, Hengda, informó a la bolsa de Shenzhen, China, que negoció un plan para poder reembolsar intereses de 35.9 millones de dólares.
Analistas les preocupa que un incumplimiento de Evergrande podría ser "la primera ficha de dominó en caer, que podría crear un efecto similar a lo que sucedió con Lehman Brothers en 2008.
Tras más de 30 años de operación, la compañía se ha visto perjudicada por las restricciones impuestas por el gobierno central desde Pekin para apalancar el sector inmobiliario.