El mandatario chino pidió a su par que ambos países, en su condición de potencias, hagan un esfuerzo conjunto para “salvaguardar la equidad internacional”.
A pesar de la inflación y de la caída del rublo, el presidente ruso se mostró muy satisfecho con el desempeño económico del país, que ha resistido "una presión exterior absolutamente sin precedentes".
Sin embargo, el presidente de Estados Unidos señaló que es demasiado pronto para saber si Putin está debilitado por la fallida rebelión del grupo mercenario Wagner.
Rusia enfrenta el peor escenario: mientras está en medio de una guerra por su invasión a Ucrania, una nueva guerra parece crecer dentro de su territorio. Un grupo paramilitar se alzó en armas contra el gobierno de Putin.
El Kremlin aseguró que los mandos no fueron informados de antemano de la visita inusual del presidente, ya que fueron convocados a los cuarteles generales para una supuesta videoconferencia.