El dólar volvió a subir, pero las causas no solo tienen que ver con lo que ocurre a nivel local. La economía global también tiene un efecto en esta tendencia. ¿Qué esperar entonces de la divisa?

Esta última semana se ha visto un aumento importante en la tasa de cambio del peso frente al dólar llegando a acercarse de nuevo a los $5.000 producto de la unión de varias fuerzas locales y externas para empujarlo tan cerca de este límite histórico. En la columna de hoy las separaré como siempre los factores entre globales y locales para poder hacer más fácil su análisis.

Lo global

En términos globales la señal a seguir es el índice DXY que muestra el comportamiento del dólar contra una canasta de monedas que son el euro, la libra esterlina, el franco suizo, el Yen japonés, el dólar canadiense y la corona sueca, lo que permite determinar que cuando aumenta se está fortaleciendo mientras que si cae se está debilitando.

En el grafico que lo compara con el peso colombiano se puede notar en el área en rojo como desde inicio de febrero de este año ha marcado un cambio de tendencia aumentando 3,04%, debido a datos relacionados con el empleo que muestran un mayor fortalecimiento del mercado laboral, lo que puede llevar a que la Reserva Federal no reduzca su ritmo de aumentos de tasa tan rápidamente como se esperaba. Si bien suena algo contraintuitivo que un buen dato de empleo generé nerviosismo, el caso aquí, es que un aumento en puestos de trabajo lleva a que los hogares tengan más ingresos lo que incrementaría su consumo, elevando los precios y dándole un nuevo impulso a la inflación, lo que a su vez podría llevar a la FED a seguir subiendo tasas por más tiempo.

Gráfico: Elaboración propia. Datos: Investing.

Lo local

En el gráfico se puede notar como la tasa de cambio del peso, también ha mostrado un aumento en la misma región, sin embargo, ha presentado una mayor volatilidad llegando inclusive a acercarse al histórico límite de $5.000 en algunas jornadas.  Vale la pena notar que si bien el DXY aumentó 3,04% en febrero, para la tasa de cambio en Colombia este impulso fue mucho más marcado con 7,42% con fuertes movimientos en especial durante la semana pasada aumentando entre el 14 y 17 de febrero alrededor de 4%.

En este sentido, el ruido local ha sido bastante fuerte debido a las medidas tomadas por el presidente en términos del control sobre las comisiones encargadas de la fijación de precios de servicios públicos y la reforma al sistema de salud que ha estado acompañado de las marchas a favor y en contra. Todo este ruido aumenta la incertidumbre de los inversionistas por lo que los flujos en dólares salen no solo atraídos por el efecto global de posibles aumentos de tasa en Estados Unidos sino por también para cubrir una mayor percepción de riesgo, lo que alinea las fuerzas y lleva a ver movimientos tan fuertes como los que se han presentado en el mes de febrero que ya corrigió toda la tendencia de enero.

Creo que una lección importante de este escenario es que tanto las expectativas internas y externas importan, por eso si bien no podemos tener control sobre los datos económicos ni la FED en Estados Unidos, si el manejo de la narrativa del gobierno a nivel local podría mejorar para transmitir calma en lugar de exacerbar aún más el impacto de las fuerzas que externas que ya venía debilitando al peso.

Por:Gregorio Gandini*
*El autor es fundador de Gandini Análisis, plataforma donde crea contenido de análisis sobre mercados financieros y economía. También es el creador del podcast Gandini Análisis y se desempeña como profesor en diferentes universidades en temas asociados a finanzas y economía.

Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes Colombia.

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