¿Qué pasa con las relaciones entre China y Taiwán y cómo las más recientes elecciones marcan el camino en materia internacional?
El pasado 13 de enero se llevaron a cabo las elecciones presidenciales en Taiwán, con una histórica victoria por tercera vez consecutiva para el Partido Progresista Democrático de la mano Lai Ching-te, quien era el anterior vicepresidente y obtuvo 42% de los votos. Es muy posible que esta elección marque en términos de política internacional una continuidad frente a la anterior presidenta Tsai Ing-wen quien no pudo lanzarse esta vez al haber cumplido el máximo de dos mandatos permitidos y que ha defendido la independencia taiwanesa haciendo más tensas las relaciones con China.
Precisamente, para entender su compleja relación con China es necesario revisar algo de su historia, ya que es el territorio donde el Partido Nacionalista o Kuomitang fue desplazado por el Partido Comunista después de la guerra civil de 1949. Esto ha generado dos narrativas alrededor de este hecho, la primera donde el Kuomitang considera a Taiwán la verdadera República China, mientras para el partido comunista chino es considerada una “provincia rebelde”. Particularmente el presidente Xi Jinping ha sido bastante claro en su posición al respecto cuando en su discurso de fin de año manifestó que la reunificación de China con Taiwán es una “inevitabilidad histórica”.

Debido a que es un estado con reconocimiento limitado, el apoyo de Estados Unidos nunca ha sido directo, pero siempre ha sido claro su interés en el archipiélago. A la luz de la carrera presidencial en noviembre en la cual Donald Trump va tomando fuerza de nuevo, las relaciones y lo que suceda en Taiwán será muy importante por dos motivos. El primero, como escenario de choque con las aspiraciones de influencia geopolítica china en la región.
El segundo, por ser la sede de Taiwan Semiconductor Manufacturing Company Limited o TSMC, que en 2021 tenía un 54% de participación del mercado mundial de semiconductores de acuerdo a Trendforce mientras que la coreana Samsung la segunda compañía estaba muy por debajo con 17%. En este momento, es probablemente este segundo punto el que mayor importancia estratégica tiene, ya que las compañías chinas SMIC y HH Grace combinadas llegan a 6% de participación lo que le representa una seria desventaja en la carrera de desarrollo tecnológico de China contra Estados Unidos por lo que una relación cada vez más complicada entre Pekín y Taipéi es algo que juega a favor de Estados Unidos al quitarle acceso al mercado de semiconductores al gigante asiático.
S bien esta ha sido la primera de varias elecciones que veremos este año, sin lugar a dudas tendrá un impacto importante en la región de Asia Pacifico precisamente por las características estratégicas de Taiwán mencionadas arriba, pero también es parte del gran rompecabezas, que se completará en 2024 con la elección presidencial en Estados Unidos y los resultados económicos chinos, que definirán como será el nuevo balance entre estas tres naciones.
Por: Gregorio Gandini*
*El autor es fundador de Gandini Análisis, plataforma donde crea contenido de análisis sobre mercados financieros y economía. También es el creador del podcast Gandini Análisis y se desempeña como profesor en diferentes universidades en temas asociados a finanzas y economía.
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