En la vida, como en los negocios, es necesario gerenciar y tener buenas prácticas de líder para poder alcanzar buenos resultados. ¿Cómo?

Gerencia es la forma de administrar una empresa, un proyecto, un emprendimiento y por qué no, nuestra propia vida. El resultado de la Gerencia en cualquiera de los escenarios es el desempeño con el que hemos avanzado en nuestro el ciclo vida, encontramos gerentes con los siguientes comportamientos: uno con resultados sobresalientes, planea, investiga, compara, hace pruebas y ejecuta con la debida precaución, analizando los pros y contras, pero siempre avanzando y con la mirada al norte, un segundo sobresale pero con desempeños poco efectivos, dispersos, baja planeación, la investigación a medias, no se percibe ordenamiento en sus actividades, poco analítico y su ejecución sin los resultados, sin avances que mostrar, no tienen un foco claro.

Es por eso, que nuestra vida se desarrolla a través de la gerencia que le aplicamos, empezamos desde  temprana edad, nos administramos, tomamos decisiones desde un simple juego y en la medida que crecemos las decisiones son permanentes, en cada etapa de la vida, en el colegio, al escoger la carrera profesional, una inversión, en la compra de un vehículo, una casa, un viaje y hasta en elegir nuestra pareja, son eventos y muchos mas entre otros que aplicamos la gerencia.

Todo lo que hoy somos, son el resultado de nuestra propia gerencia, perdí el colegio o el semestre  por culpa del docente, llegue tarde al trabajo por que el trafico es una porquería, que la plata no alcanza por que gano poquito, que estoy con sobrepeso por que no me dan la comida qué me merezco, que mi jefe no me entiende, la empresa que le he entregado mi vida  no paga bien y no asciendo, son salidas del gerente que justifica sus resultados pobres, su guion es culpar al vecino de lo que le sucede, no asume responsablemente, no aplica los correctivos que le permiten mejorar con seguridad su vida, contrario a esta gerencia, encontramos la otra orilla, la otra cara de la moneda, el otro Gerente de vida que logra buenos resultados por sus decisiones responsables y por supuesto en muchos casos se ha equivocado sin obtener buenos resultados, pero siempre aplica los cambios que se requieran para enfilar la corrección y obtener lo mejor para su vida.

Veamos ahora, en la toma de decisiones que realizamos a diario como gerentes de nuestra propia vida, lo hacemos por una causa y el resultado que genera es una consecuencia, por tal razón hay que ser responsables, evaluar en cada paso el impacto de nuestras decisiones, que tanto nos afectan?, que tanto a las personas que nos rodean?, a nuestros seres queridos y amigos en general, el control y análisis a nuestras decisiones es lo mínimo que debemos aplicar, podemos caer  en el egoísmo, el solo yo, es por eso que evaluemos  las consecuencias y los impactos, por nuestro bienestar y por los que tenemos cerca.

A todos, sin excepción, nos llegan las oportunidades en la vida, escasas pero siempre aparecen, ahí es el momento de la verdad, como aplicamos nuestra propia gerencia para escoger el camino correcto, lo tomo o lo dejo, si hubiera sido militar hoy seria General, o arquitecto o agrónomo, o veterinario o un empresario exitoso, estos  comentarios que escuchamos a diario son lamentos irreparables, por no lanzarnos a abrir caminos, aprovechen del tesoro que se llama vida, juventud, sean visionarios, tener las antenas puestas y tomar las mejores decisiones de vida, el tiempo es implacable y les va a recordar no haberlo hecho.

Finalmente, mirémonos al espejo, veremos al frente el Gerente de nuestra vida, hagamos un pare, una evaluación a su comportamiento gerencial, todo lo que hoy nos esta sucediendo es por sus decisiones, califiquémoslo, podemos darle una felicitación por su avance pero también un llamado de atención si requiere correcciones.

Mírese al espejo y evalué…  

Por: Wilson Triana*
*El autor es experto y consultor en banca y seguros.

Las opiniones expresadas son sólo responsabilidad de sus autores y son completamente independientes de la postura y la línea editorial de Forbes Colombia.

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